Todos los días me cuesta algo de trabajo levantarme en cuanto suena el despertador, lo pongo en stand-by para que vuelva a sonar a los pocos minutos, mientras tengo el sueñito más rico: ésos 5 minutos que se disfrutan más que una discúlpa del más odiado colega.
Hoy, me estiré como gato y me levanté en cuánto sonó el despertador, le dí los buenos días a mi esposo y a peque (junto a su inquilino canino) y me dirijí al baño para ver los estragos que la noche dejó en mí. ¡Sorpresa! Hoy desperté menos fregada que lo que amanezco los lunes habitualmente. Jeje. Desgraciadamente no hay fotos para que ustedes corroboren los hechos.
Bueno, vuelta al mundo bloggeril... pero a pausas. ;-)
El dinero es cosa de mujeres
Hace 6 meses.
3 comentarios:
yo como ya ando descansando me levanté muy relax a eso de las 8 y nomás fui al banco a pagar la tarjeta...me imagino el frío que se empieza a sentir por allá arriba....que tengas una linda semana...un abrazo y un beso
Hola Andy! ¿Verdad que no se puede dejar esto, verdad que es adictivo saber de este y de aquel, y que ciertas vidas nos gustan para ver cómo se viven? Qué gusto saber que has regresado, porque no mucha gente escribe tan bien y de manera tan personal como tú; te envío un abrazo y muchas felicitaciones en esta época, no dudo que Toluca por estas fechas debe ser un lugar muy atractivo para andar por ahí, aunque en mi caso iría un ratito solamente porque el frío nada más no me sienta. Bienvenida otra vez!
Entonces ya regresarás al posteo diario? Esas son good news!
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